Increíble, para las fechas y fríos que corren, ver la floración explosiva de alguna especie
vegetal, pero así ha sido y todos los años por estas fechas, los lirios de
invierno, por lo menos, lo intentan. La cosa solamente les sale bien, aproximadamente,
uno de cada tres intentos, pues uno de cada tres años por estas fechas caen
unas pelonas tan duras que no hay planta que pueda soportarlas y florecer al
mismo tiempo, otros años se llevan consecutivamente una de cal y otra de arena,
combinándose alguna flor en buen estado y congeladas flores marchitas, dando
una breve floración medio fallida; y por fin, llega un año en que se produce
una buena y larga floración.
El año pasado los lirios sufrieron las inclemencias de una año seco y frío
Un
año bueno, como este, la floración puede iniciarse a principios de diciembre y
acabar a finales de febrero, aunque lo normal es que ocurra de mediados de
enero a finales de febrero, solapándose los últimos lirios con los primeros
almendros floridos. Ha faltado la foto que se podría ver muchas mañanas, de esos
colores nazarenos adornados por la escarcha, otra vez será.
En otros
lugares donde no hay lirios de invierno, ese nombre a veces se lo dan a otros
lirios, las patitas de burro (Ginandriris
sisyrinchium), de menor tamaño y que más que de invierno, son de inicios de
primavera y aparecen en un área geográfica casi coincidente, pero algo más extensa y sobre
todo tipo de suelos.
Las patitas de burro Gynandriris sisyrinchium en algunas zonas se denominan lirios de invierno
El lirio de
invierno en Ciudad Real tiene una distribución muy especial, está asociado
exclusivamente a suelos de naturaleza volcánica o su inmediata vecindad. Su
distribución no se encuentra en ellos generalizada, pues no aparece en la zona
volcánica sur (de Almagro a Puertollano), lo que podría tener que ver con un
ligero endurecimiento de las condiciones climáticas, no como en torno a los valles que van a converger al
Guadiana, donde son extraordinariamente abundantes sobre volcanes y coladas.
Lirios en una loma al borde del Guadiana
El nombre
científico de este lirio (Iris) está
a punto de cambiar. Pese a lo mucho que me contraría mudar lo aprendido, no
puedo sino alabar la labor investigadora desarrollada para reventar la anterior
clasificación de los lirios ibéricos bajo el paraguas del género Iris, a partir de ahora, en seis diferentes
géneros ibéricos (Iris, Juno, Chamaeiris,
Xiphion, Limniris y Ginandriris),
algunos monoespecíficos como Juno, Limniris y Ginandriris que son, respectivamente, el
lirio de invierno, el lirio amarillo o lirio de agua y la patita de burro.
Un par de veces he visto lirios totalmente blanco, este año este ha sido el más albino que he visto
Me va a dar rabia ver flores de lirio bajo nombres que no incluyen el genérico Iris, pero los potentes estudios
filogenéticos, la exhaustiva búsqueda de datos y la gran labor de herbario de estos buenos investigadores, no admite
discusión; aparte de la valentía de romper con todo y hacer borrón y cuenta
nueva. Un punto a favor de Flora Ibérica, algo que no puedo decir de otros géneros ya remodelados o algunos que nada más ser publicados ya pedían a gritos una
remodelación que no les ha llegado.
Pero esa volcánica fertilidad ha jugado siempre en contra de la vegetación natural, dado el intensivo aprovechamiento agro-ganadero que han sufrido desde muy antiguo todos estos campos, por lo que es casi imposible encontrar algún volcán poco alterado. Baste señalar el topónimo de Piedrabuena, un próspero pueblo cuyo pedregoso terreno está casi totalmente cultivado en sus áreas volcánicas y apenas en todas las demás, aún siendo éstas mucho menos pedregosas.
En el, nunca arado, borde rocoso de una colada de lava abundan los lirios
Los lirios
como todos los geófitos, es decir aquellas plantas que poseen bulbos, rizomas o
tubérculos subterráneos para sobrevivir en las épocas adversas, son totalmente
vulnerables al arado de los suelos. Esto queda patente en el parcelario de
amplias zonas pedregosas de estos volcanes. Con las labores de reja, solamente
encontramos lirios en los bardales y medianeras del parcelario, donde se acumulan
los grandes bloques de lava apartados de los sembrados.
En los
asomos rocosos y en esas medianeras, han permanecido acantonados los lirios
hasta que largos barbechos o el abandono de fincas les ha permitido
reconquistar de nuevo esos espacios, pero siempre conquistando con más pujanza la inmediata cercanía de esos pedregosos bordes de
las parcelas. Otros geófitos, como orquídeas y
narcisos, no tienen tanta capacidad de expansión y permanecen acantonados en
escasos lugares o en peligro de desaparecer de muchas tierras.
Un verdadero placer leer cada entrada de tu blog, por fin a alguien le interesa la flora de Ciudad Real!
ResponderEliminarCiudad Real es una joya desconocida, casi todos tienen la idea de que es aquello que se atraviesa con aburrimiento camino de Andalucía. Pero cuenta con paraísos botánicos semi-privados poco conocidos, como las turberas, los abedulares, mirtos de Bravante, etc. De endemismos solo tiene el Narciso de Sierra Morena, pero por poco no tiene otros como: Dianthus toletanus, la carnívora Drosophylla lusitanica, etc. Pero tiene, en su límite de distribución, muchas de las plantas norteñas y otras más de las sureñas.
ResponderEliminarBonita entrada, no dejo de sorprenderme cuando paso por aquí. Gracias por divulgar.
ResponderEliminarhttp://elblogdejavieratrio.blogspot.com.es
Ahora, después de las lluvias, el Colchicum triphyllum se ha hecho muy visible. Lo veo con facilidad en páramos calizos del entorno de Alcázar de San Juan, concretamente en las inmediaciones del arroyo Albardial que da nombre al blog.
ResponderEliminarCoincido con el anónimo que me precede: son todo un placer tus fotografías y explicaciones.
Magnificas imagenes de esa bella planta...
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ResponderEliminarDe Jose Luis Magallares (Jose Manco /Jose Muñones)
ResponderEliminarGracias impagables Enrique Luengo por esta y otras Volcánicas entradas Calatravas que Juani y yo no nos cansamos de repasar. Texto fantástico, muy cómoda lectura en letra grande (nos vamos haciendo viejos y sin gafas no hay manera) con fotos apasionantes. Fue y será siempre un honor dedicarte aquel "volcán en miniatura" que simbólicamente encendimos para ti. Resultó espectacular, preguntes a quien preguntes. Postdata: gracias extra por tu explicación inicial en la reciente quedada de La Vereda Blanca/Casa de El Montero/Villacabras/Laguna de San Juan. Da gusto escuchar y dejarse conducir por personas especialmente buenas, capaces y sabias.
Un volcánico "ARBAzo", compañero :)
y este beso Muacccccc para ti de mi esposa Juani
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